Los estudios de prevalencia señalan que el 46-89% de los/as niños/as con TEA tienen problemas de alimentación.
La alimentación es esencial para tener un buen estado de salud. Y garantiza que el/la niño/a estén nutridos para que su cerebro se desarrolle y pueda aprender.
En este post os contamos las posibles causas que existen para que los/as niños/as con TEA presenten problemas de alimentación. Estos factores subyacentes son tan diversos que es importante por un lado que el/la niño/a puede ser evaluado por un equipo (logopeda, terapeuta ocupacional, neuropsicólogo y/o psicólogo) y por otro lado que los profesionales que os atiendan estén formados en alimentación.